*** Destacaron que el pasado 2 de mayo los trabajadores informales le solicitaron una mesa de trabajo con el ciudadano Alcalde Rafael Paredes, “sin embargo, hasta el momento no nos han dado respuesta, pues es necesario que se aclaren algunas situaciones que él, de seguro ni conoce, primero allí laboran madres solteras, …”.
(Kathiuska Francis).- Un grupo de trabajadores informales que laboran en las adyacencias del mercado Bicentenario, quienes tienen ubicados sus quioscos en esos espacios desde hace 15, 18 y hasta 26 años, siendo los sitios de trabajo donde se ganan el sustento diario de su familia, denuncian que las acciones que cometen últimamente la Alcaldía de Barinas para la recuperación de los espacios a través de la dirección de Ingeniería municipal y Urbanismo, están violentando los derechos constitucionales, así como las leyes especiales.
Así lo recalcaron las personas afectadas Nidia Rojas, Maycol Solis, María Tosoy, perteneciente a la comunidad indfigena, Karen navarro, Evelyn Molina, Yimi Vera, Cleide Solis, Cristofer Fary y Milagro Laya, quienes explicaron que a través de una notificación publicada en este medio que realizó la Dirección de ingeniería y urbanismo, que dirige el ingeniero Miguel Ángel Gómez, informaba “que el tiempo reglamentario para el desarrollo de las actividades en ese sitio se habían cumplido, especialmente los que estamos ubicados en la cerca perimetral, lo que es una irresponsabilidad cuando existen todavía algunas situaciones que no se han aclarado”.
Destacaron que el pasado 2 de mayo los trabajadores informales le solicitaron una mesa de trabajo con el ciudadano Alcalde Rafael Paredes, “sin embargo, hasta el momento no nos han dado respuesta, pues es necesario que se aclaren algunas situaciones que él, de seguro ni conoce, primero allí laboran madres solteras, además hay casos especiales como el del niño Cristofer Pérez que presenta cardiopatía congénita, quien amerita tratamiento de forma permanente, y tiene un costo mensual aproximadamente de $200, fuera de los estudios”.
Acotaron que en el caso de “la señora María Tizoy, quien tiene bajo su tutela a cuatro nietos, pues perdieron a la madre debido a la inseguridad que existe en la ciudad, el señor Michael Solís, quien es paciente de reuma con gota y el último caso es la de un joven casi incapacitado, y es padre de cuatro hijos, a pesar de todo esto, nos quieren desalojar”.
Enfatizaron los afectados que el pasado 4 de mayo, asistieron a la Sindicatura municipal para llegar a un acuerdo para una reubicación, “la cual hicimos a ciegas, porque era eso o nada, así se nos dijo, y por el temor de quedarnos sin nada, lo aceptamos, reconocemos que esto fue un medio de chantaje o amedrentamiento, por lo que aceptamos a firmar, sin embargo, al irnos a tomar posesión de los puestos, nos dimos cuenta que no reúnen las condiciones para realizar ninguna actividad económica”.
Puntualizan que “los que venden verduras y frutas lo asignaron en el área de la cocina, lugar donde no hay acceso para la clientela, los que se dedican a la venta de comida tienen que hacer una gran inversión para acondicionar los puestos, pero no tenemos dinero, los que realizan trabajos con papelería no tienen un espacio apto para ejecutar esta actividad, además el agua que llegan a los puestos es insalubre, siendo un riesgo para la salud pública, pues el tanque no tiene tapa desde hace años, y alrededor de allí está muy cerca un botadero de basura y excrementos.
“Después de observar todo ese lugar y no estar conforme, realizamos de inmediato la denuncia tanto en sindicatura como en la administración del mercado Bicentenario, pues consideramos que nos han violado los derechos constitucionales, la Ley Orgánica del Niño, Niña y Adolescente, los artículos 26 y 51 de la Constitución de la República, la Defensoría del Pueblo en su artículo 15 y Ley Orgánica del Procedimiento Administrativo”, aclararon los trabajadores.
Finalmente, resaltaron los trabajadores informales que ellos están defendiendo su derecho al trabajo, por tal motivo, “ingeniero Miguel Gómez, si están recuperando espacios públicos, díganos qué pasa con los terrenos frente a la Alcaldía donde se iba a construir la cárcel pública para evitar el hacinamiento, hoy finca La Fortuna, qué está pasando en la ciudad que está sumida a la basura, porque no arreglar este grave problema, en vez de arremeter contra humildes trabajadores, Señor Alcalde Paredes, le reiteramos que deseamos una mesa de diálogo con la Alcaldía”.