Divina Pastora peregrina virtualmente por el fin de la pandemia
Por segunda vez en medio de una epidemia y luego de 165 años de devoción, la Divina Pastora tendrá una “peregrinación virtual” en el ciberespacio
(Caracas, ene 10).- Venezolanos en el mundo podrán unir sus
súplicas con la esperanza de que repita su intercesión milagrosa: esta vez por
el cese del coronavirus. También, de las circunstancias que han ocasionado una
migración forzada y unas condiciones de vida que castigan a millones de
familias.
La pandemia que llegó sin aviso a desafiar los sistemas sanitarios y forzar un
distanciamiento físico entre las personas para evitar el contagio de la
covid-19 tocó una de las mayores manifestaciones en honor a la Virgen María en el
mundo.
Aún latente el virus que cobra la vida de venezolanos en una red hospitalaria
que no se da abasto para atender pacientes con deficiencias respiratorias que
requieren respiración asistida y medicamentos costosisimos, la Arquidiócesis, en la
voz de su Administrador Apostólico, Monseñor Víctor Hugo Basabe, anunció que
este 14 de enero no habrá peregrinación con la efigie de la Virgen María en
advocación de pastora sevillana: la de 2021 será una “peregrinación virtual”.
«Bastarían solo diez personas contagiadas en semejante multitud para que, en
poco tiempo, tuviésemos una emergencia sanitaria que podría costar la vida a
miles de hermanos», dice su carta pastoral.
La siguen llamando visita porque, aunque este año la patrona no será sacada en
hombros y tampoco en el automóvil acondicionado para ello, la Divina Pastora
viajará en el fervor de cada devoto desde sus hogares.
Una historia de fe en la
Pastora
Es la número 165 por los años transcurridos desde el nacimiento de la
peregrinación: en 1856, el sacerdote José Macario Yépez convocó una rogativa
pública en un sector llamado Cruz Blanca, en Barquisimeto, e hizo llevar la
imagen para ofrecer su vida a cambio de que la Madre de Cristo mediara ante Dios por el cese de
la epidemia de cólera que diezmó a la población. Y así fue: los historiadores
discrepan sí de cólera o fiebre tifoidea, pero el padre Yépez murió y la
epidemia terminó.